El desfase en Punta Ballena este pasado fin de semana sigue dejando imágenes que muestran el grado de descontrol en el que termina la fiesta para miles de jóvenes turistas británicos y franceses una vez los locales cierran en cumplimiento de la normativa COVID-19.
Un turista se sube sobre un taxi, animado y coreado por cientos de personas, mientras el vehículo está en movimiento, abriéndose paso entre la multitud. Todos jalean la imprudencia.
Al parecer se ha puesto 'de moda' semejante 'hazaña', una peligrosa acción que algunos se empeñan en repetir a menudo en el punto neurálgico del turismo de desfase en Calvià, donde este fin de semana la Guardia Civil y la Policía Local de Calvià tuvieron que realizar varias cargas para evitar que una multitud de turistas bloquearan los accesos a Punta Ballena y cortaran las calles.
En las imágenes, se puede observar cómo el joven alcanza el techo animado por sus amigos. Una vez que el turismo prosigue la marcha y acelera, el turista se percata de que está perdiendo la verticalidad y salta de nuevo a la calle. Acto seguido, sus conocidos acuden hasta su posición para felicitarlo por la hazaña conseguida.
Estas imágenes forman parte del final de fiesta que se vivió esta madrugada del domingo, cuando más de 500 jóvenes bajo los efectos del alcohol y sustancias estupefacientes se congregaron frente a los primeros locales de la principal zona turística del municipio.
Lo que comenzó siendo una fiesta de bailes, cánticos y gritos fue subiendo de nivel hasta que acabó con cortes de calles y decenas de jóvenes golpeando coches. Además, los turistas comenzaron a lanzar botes de gas pimienta provocando picores y problemas de respiración a los transeúntes.
A todo ello hay que sumar este nueva imprudencia de rodear coches y subirse sobre ellos, mientras alrededor cientos de personas aglomeradas, sin distancia de seguridad y sin hacer uso de la mascarilla celebran la superación del reto.
Fuente: Última Hora