El acusado mantuvo decenas de encuentros sexuales con cuatro adolescentes de entre 14 y 17 años en hoteles de Calvià a cambio de dinero, drogas y regalos - La sala descarta que no supiera que las
víctimas eran menores de edad
El Tribunal Superior de Justicia de Baleares (TSJB) ha ratificado la condena de ocho años y medio de cárcel a un hombre por prostituir a cuatro menores, dos de ellas tuteladas. El
acusado pagó miles de euros, suministró drogas e hizo costosos regalos a las adolescentes, de entre 14 y 17 años, a cambio de mantener relaciones sexuales en hoteles de Calvià. El procesado
insistió en su recurso en que no sabía que las chicas eran menores, pero los magistrados consideran acreditado que era plenamente consciente de su edad. La sala de lo civil y penal de TSJB
ratifica así la sentencia que le declaró autor de cuatro delitos de corrupción de menores.
El condenado, un nigeriano de 40 años, vivía en el extranjero pero venía con frecuencia a Mallorca. Durante el año 2019, contactó a través de las redes sociales con cuatro
adolescentes -dos de ellas tuteladas y residentes en centros de acogida- para mantener relaciones sexuales con ellas en hoteles de Palmanova y Magaluf. Las menores acudían a los
establecimientos sin ningún control por parte de los empleados, que los pedían la documentación ni las registraban como huéspedes. Entre abril y octubre de aquel año se produjeron decenas de
encuentros sexuales por los que el hombre entregó importantes cantidades de dinero a las adolescentes, a las que también daba cocaína, éxtasis y marihuana y les regalaba ropa. El acusado fue
detenido por la Guardia Civil el 23 de octubre de 2019. Los agentes lo sorprendieron cuando estaba con una de las menores en un hotel. El hombre permanece desde entonces en prisión.
El procesado no negó haber mantenido relaciones sexuales con las adolescentes, pero alegó que ellas le decían que eran mayores de edad y él no lo puso en duda. La Audiencia, sin embargo,
sentenció que «obró con conocimiento de la minoría de edad de las víctimas» y que dos de ellas estaban tuteladas en centros. La investigación de la Guardia Civil permitió encontrar
numerosos mensajes entre el acusado y las víctimas en los que las chicas hacían referencia a su edad e incluso le explicaban que estaban viviendo en centros de acogida para menores.
2.500 euros de indemnización
El acusado, en su recurso ante el TSJB, insistió en ese argumento, que ha vuelto a ser rechazado. Los magistrados tampoco atienden su petición de que se le aplique una atenuante de confesión o
colaboración con la Justicia.
La sala confirma así la condena de ocho años y medio de prisión como autor de cuatro delitos de corrupción de menores y la indemnización de 2.500 euros fijada para cada una de las adolescentes
por daños morales.